Gato Doméstico

Al igual que sucede con nosotros y otros mamíferos, los perros y gatos atraviesan algunos cambios considerables en su dentadura a lo largo de sus vidas.

La principal razón es porque los gatos son animales carnívoros y, naturalmente, no necesitan consumir leche una vez que han dejado de ser amamantados por su madre. Esto conlleva a que su sistema digestivo se adapte a una dieta basada principalmente en carne.

Los dientes de los gatos son una herramienta fundamental para su supervivencia. Les permiten comer a sus presas cuando despierta su instinto cazador, y sus largos colmillos les dan ese aspecto salvaje característico de su especie felina.

En los gatos domésticos el cuidado dental es de gran importancia, pues existen muchos problemas de salud relacionados a la salud bucal de los felinos. Por ello, resulta pertinente saber cuando comienzan a caerse los dientes de nuestros peludos mininos, sin olvidar que debemos estar informados sobre las causas y cuidados especiales.

Cada hogar es un mundo y la forma de relacionarnos con las mascotas también ya que son un integrante más de nuestra familia .
Un estudio revela cómo pensar conexiones, empáticas y auténticas con nuestros amigos de cuatro patas más fieles.

Los perros con el paso del tiempo han aprendido a leer, y decodificar el lenguaje y gestualidad de los seres humanos. Es por eso que la relación funciona cuando hay interés de las dos partes.

Tenemos la creencia equivocada de que nuestras mascotas no se ven afectadas por el frío debido a su pelaje. Sin embargo, no siempre es garantía de protección, algunos peludos pueden llegar a incomodarse al estar en climas con bajas temperaturas, incluso enfermarse.

Es necesario mencionar que hay razas y condiciones especiales que hacen más vulnerables a algunas mascotas, como lo son: Los de pelaje corto, cachorros, ancianos y aquellos que cuenten con una condición de salud.

Sí, los gatos también pueden ser intolerantes a la lactosa. Pero primero hablemos de qué se trata este tipo de intolerancia.

Algunos de los tipos de ruidos que son molestos para los gatos:
Ruidos fuertes: tienen un umbral de audición muy alto y pueden sentirse incómodos con sonidos fuertes
Ruidos repetitivos: pueden ser muy sensibles a los sonidos repetitivos o monótonos.
Ruidos de alta frecuencia: tienen una capacidad auditiva muy sensible y pueden escuchar sonidos de alta frecuencia que están más allá del alcance de los humanos.
Ruidos de baja frecuencia: Aunque son especialmente sensibles a los sonidos de alta frecuencia, también pueden sentirse molestos por los de baja frecuencia.
Ruidos inesperados: son animales muy curiosos y se asustan fácilmente ante los ruidos inesperados.